Los Dominicos llegaron a Cracovia por invitación del entonces obispo de la ciudad Ivo Odrowaz, quien en sus inicios les cedió la Iglesia de la Santa Trinidad, la cual unos veinte años mas tarde seria una nueva iglesia, mas grande y monumental todavía, aunque no inmune a los devastadores efectos del fuego, el cual la devoró totalmente en una ocasión, aunque pronto fue reconstruida, y a cada restauración que se le realizaba, se hacia mas grande y magnifica.

La Iglesia Dominica de Cracovia cuenta con varias capillas laterales y tres naves. La capilla mas conocida es la de San Jacinto, donde esta la tumba del primer Dominico Polaco. Actualmente en este convento se aloja la sede del Estudio de Filosofía y Teología y la biblioteca de estudios de la provincia. Los hermanos Dominicos regularmente realizan actividades religiosas que involucran a la comunidad, entregando además el servicio de confesiones a toda la comunidad.

Los Dominicos incorporaron el modelo occidental de cristianismo, muy ligado con la cultura escolástica. En la época de proliferación de nuevos conventos dominicos, se incremento la cantidad de estudios y bibliotecas, aunque muchos pastores descuidaron sus deberes, posiblemente por la soledad y la distancia, especialmente los que estaban a cargo de pequeños conventos ubicados en villas rurales.

Fue después de la Segunda Guerra Mundial que se reinicio la actividad pastoral ligada a lo académico, debido a que durante la guerra se destruyeron muchos templos y perecieron numerosos monjes. Aun con esa tragedia a sus espaldas, los hermanos se multiplicaron y erigieron nuevas construcciones, fundaron nuevos conventos en Szczecin (Stettin), Rzeszow, Ustron y Sandomierz. Los mismos hermanos Dominicos levantaron posteriormente una casa en Vitebsk en Belarus, Munich y Nueva York.

Foto: sobol-viajes